5.5.13

Asco en el MUAC


No es poco común que uno asocie arte conceptual con algo lejano de cualquier aplicación práctica y/o social de ideas, a final de cuentas el apellido es común denominador de abstracción y casi una intencionalidad de ella.

ASCO: Elite de lo oscuro es una contraversión de esa asociación casi preconcebida que tenemos cuando visitamos un museo de arte contemporáneo.

ASCO fue un grupo de artistas chicanos activo entre 1972 y 1987 y que intenta responder a la situación de discriminación que sufría (y sigue sufriendo) en USA la nación mexico-americana del sur de estados unidos principalmente, aunque no solamente dentro de esa región geográfica y no solamente la sufría en los Estados Unidos. 

El espacio de juego del arte chicano es interesante no solamente por hallarse dislocado respecto a la cultura norteamericana sino también con respecto a la mexicana. El chicano tiene ese incómodo status del hijo no reconocido por ninguno de sus progenitores, ha sido visto como incómodo tanto para los Estados Unidos como para México. Es invasor para algunos y traidor para (nos)otros. 
La segregación es doble, pero también es ello lo que abre su universo de (re)significación.     

Conformado por Harry Gamboa Jr, Gronk, Patssi Valdés y Willie F. Herron III, ASCO es una mezcolanza de técnicas de expresión artística desde la segregación chicana (económica, cultural e incluso geográfica) con la disidencia política de la época.
Claro que se requiere explicar el acento en cada uno de estos términos, ya que por mescolanza habría que acudir al sui generis que define a un grupo artístico que tuvo no siempre los mismos integrantes no siempre en las mismas regiones geográficas; la unidad del mismo parece dada no desde el contenido político sino desde las condiciones de su origen: ese espacio no localizable en el mapa del arte y/o la cultura, es decir, el chicano en USA.

También cuando hablamos de técnicas de expresión habría que apuntar que lo dicho, con palabras sí pero sin palabras también, se vale de las limitaciones técnicas para hacer de ellas un estilo por sí mismo. Es decir, y por ejemplo, que ante la ausencia de espacios designados para la expresión ASCO recurre a los espacios públicos para resignificarlos y dotarlos de un carácter social que la cultura dominante insiste en obviar. Para muestra vale la procesión en Los Ángeles durante la nochebuena de 1971 a lo largo del Whittie Boulevar que inaugura las actividades de ASCO y con la cual nace como grupo artístico, lugar en el que 1 año antes había ocurrido la primera gran manifestación Chicana por los derechos civiles y en contra de la guerra de Vietnam.

La procesión (al modo de las procesiones latinas durante semana santa) incluyó a solamente 3 personas, integrantes de ASCO las 3, y terminó con la colocación de una cruz frente a una base de la marina estadounidense. Este acto, documentado sólo por accidente, da forma a lo señalado por ASCO: la única salida para el chicano de West-LA es la guerra (defendiendo a una cultura que les excluye y en un país del otro lado del mundo) pues no hay para ellos más oportunidad de desarrollo.  





Estos espacios segregados por la cultura dominante son aquellos que deben usarse para la disidencia. Todo uso de técnicas de expresión aceptadas socialmente es un ab-uso del concepto del que nace ASCO; todo convencionalismo es una validación de la linealidad y una conformidad con lo disforme, es decir con la diferencia específica entre grupos sociales y la explotación políticamente correcta de unos sobre otros.

La No-movie es, por ejemplo, la respuesta ante la narrativa lineal del cinematógrafo. Se trata de unas cuantas fotografías montadas en un proyector y con una audiograbación de fondo, con lo que se intenta mostrar que el contenido visual/verbal no es necesariamente el hilo conductor de la narrativa, sino que ella se da a través de la interacción del espectador con la No-movie en la que el sentido está en el lector y en toda la preconcepción de sentido que se tiene al encuentro con la No-movie. El origen del significado está en el pasado del que interpreta y no en el presente del que se expresa, y cuando el pasado del que interpreta se da desde una construcción (la socialmente aceptada segregación de un grupo) lo que ocurre es una perpetuación de la exclusión social y la repetición de la segregación, la categorización de las minorías.






Así la disidencia política no es la pura acción, sino la resignificación de las acciones a través de la acción misma, el performance.
  


Les recomiendo que se den una vuelta por el MUAC para ver Asco: elite de lo oscuro, estará hasta el 28 de julio de 2013 (si se les pasa la fecha no pasa nada, en el MUAC siempre hay algo que ver).